Shell, el gigante energético británico, anunció el 25 de abril de 2025 su retirada de tres importantes proyectos de gas natural en aguas del Caribe colombiano. Esta decisión representa un cambio significativo en el panorama energético del país sudamericano y refleja las nuevas prioridades estratégicas de la multinacional.
Shell reorienta su estrategia global y abandona proyectos en Colombia
La compañía petrolera británica ha decidido retirarse de tres proyectos offshore en el Caribe colombiano donde mantenía una participación del 50% desde 2020. Esta decisión está alineada con el anuncio realizado por Shell en marzo, donde expuso su intención de reducir costos por varios miles de millones de dólares, aumentar la rentabilidad para sus accionistas y concentrar sus operaciones en el sector del gas natural licuado (GNL).
Según comunicó Ecopetrol, la empresa estatal colombiana que posee el otro 50% de participación en estos proyectos, la retirada de Shell responde exclusivamente a razones estratégicas relacionadas con la gestión global de su cartera de inversiones. La decisión no estaría vinculada directamente con las condiciones específicas del mercado colombiano, sino con una reorientación más amplia de las prioridades de la compañía en el ámbito internacional.
Los proyectos afectados por esta decisión están relacionados con el descubrimiento de un importante yacimiento de gas natural, presentado en 2017 como el hallazgo más significativo en territorio colombiano en casi tres décadas. La retirada de Shell plantea ahora importantes desafíos para Ecopetrol, que deberá buscar nuevos socios para mantener la viabilidad de estas operaciones.
Aspecto | Detalles |
---|---|
Participación de Shell | 50% desde 2020 |
Participación de Ecopetrol | 50% (busca nuevos socios) |
Ubicación de proyectos | Caribe colombiano (offshore) |
Tipo de recursos | Gas natural |
Relevancia del hallazgo | Mayor descubrimiento en 28 años (2017) |
Impacto en el sector energético colombiano
La decisión de Shell tiene lugar en un contexto de transformación del sector energético colombiano bajo el gobierno del presidente Gustavo Petro, el primer mandatario de izquierda en la historia del país, quien asumió el poder a mediados de 2022. Petro ha impulsado una agenda que prioriza las energías renovables sobre los hidrocarburos tradicionales, lo que ha generado tensiones con los sectores más conservadores de la economía colombiana.
En 2024, el gobierno colombiano suspendió varios contratos de exploración de hidrocarburos como parte de su política energética orientada hacia la sostenibilidad. Una de las ambiciones del ejecutivo es transformar Ecopetrol, la mayor empresa empleadora de Colombia con aproximadamente 33.000 trabajadores, en un referente regional en el ámbito de las energías renovables.
Esta situación plantea varios desafíos para el sector energético colombiano:
- Búsqueda de nuevos inversores para reemplazar a Shell en los proyectos del Caribe
- Garantizar la seguridad energética del país durante la transición hacia modelos más sostenibles
- Mantener el atractivo de Colombia como destino de inversiones en el sector energético
- Equilibrar las políticas ambientales con las necesidades económicas del país
Expertos del sector y representantes de la oposición conservadora han expresado su preocupación, señalando que las políticas actuales podrían desalentar la inversión extranjera en el sector de hidrocarburos colombiano. La salida de una empresa del calibre de Shell parece darles la razón, aunque la compañía británica ha insistido en que su decisión responde exclusivamente a su estrategia global.
Futuro de los proyectos gasíferos en el Caribe colombiano
Tras la retirada de Shell, Ecopetrol se enfrenta al reto de encontrar nuevos socios con la capacidad técnica y financiera necesaria para desarrollar estos importantes proyectos de gas natural. El gigantesco yacimiento descubierto en 2017 sigue siendo un activo estratégico para Colombia, especialmente considerando las necesidades energéticas del país.
Las opciones que se presentan para Ecopetrol incluyen:
- Buscar alianzas con otras multinacionales energéticas interesadas en el gas natural
- Aumentar su propia participación en los proyectos, asumiendo mayores riesgos y costos
- Rediseñar los proyectos para adaptarlos a un modelo más sostenible que atraiga inversores comprometidos con la transición energética
- Considerar una pausa temporal en el desarrollo hasta encontrar condiciones más favorables
La capacidad de Ecopetrol para navegar esta situación será determinante para el futuro energético de Colombia. El gas natural representa un combustible de transición crucial entre los hidrocarburos tradicionales y las energías completamente renovables, por lo que estos proyectos mantienen su relevancia estratégica a pesar de las nuevas políticas gubernamentales.
Los analistas del sector señalan que la retirada de Shell podría representar una oportunidad para que nuevos actores ingresen al mercado colombiano, posiblemente con perspectivas más alineadas con la visión de transición energética del actual gobierno. Sin embargo, el desafío inmediato es mantener la viabilidad de unos proyectos que podrían contribuir significativamente a la independencia energética del país en las próximas décadas.